lunes, 24 de noviembre de 2008

AK-47, más que un fusil de asalto.


El otro día leí un artículo de Arturo Pérez-Reverte en el que reflexionaba acerca del Avtomat Kalashnikov modelo 1947, también conocido por AK-47, el fusil de asalto más famoso de la historia de la humanidad y uno de los responsables de la dicha de muchos y de la desdicha de millones. Don Arturo nos hace ver cómo ha pasado a ser más que un arma para matar a un icono en todo en el mundo.


El AK-47 fue inventado por el ex militante soviético en la Segunda Guerra mundial Mijail Kalashnikov. En la década de los 50 el ejército bolchevique lo utilizó a gran escala en la infantería. Pero no hay día que no veamos éste fusil empuñado por las manos de un niño en cualquier país del mundo en el que haya un conflicto. Sus reducidas dimensiones, su escaso peso (alrededor de cuatro kilos) que lo hacen de los más livianos, su cortísimo retroceso y sobre todo la facilidad con la que se arma y desarma (según Pérez-Reverte él lo desmonta a oscuras por placer) lo hacen perfecto para ser utilizado por cualquier persona.

Para poner de manifiesto su fiabilidad se ha utilizado este fusil bajo las condiciones meteorológicas más duras (frío, nieve), se ha sumergido bajo agua sin que el fusil sufriese daños funcionando de igual modo e incluso se ha mantenido intacto después de haberlo hundido en barro, disparando alrededor de los 300 metros de alcance que asegura su ficha técnica.

Por todas estas razones el AK47 es una de las armas de fuego reinas en todos los museos de armas, estando presente como elemento decorativo en multitud de chimeneas y colecciones.

Las credenciales de éste fusil asustan: Según Amnistía Internacional, Oxfam International y la Red Internacional de Armas de Pequeño Calibre hay actualmente en el mundo alrededor de cien millones de AK-47 y réplicas repartidos por todo el globo. No hay conflicto bélico donde no se encuentre y anualmente es el responsable de que miles de personas mueran al año por sus disparos y de que los niños más jóvenes conozcan de primera mano la barbarie de la guerra.

El 27 de abril de 1986, Mijail Kalashnikov hizo unas declaraciones a “Juventud Rebelde” uno de los periódicos ligados al Partido Comunista de Cuba en el que aseguró:
"Yo creé un arma que ayudara a defender las fronteras de mi patria y ese sigue siendo su objetivo”, "Lamento que mis diseños no siempre sigan los fines con que fueron creados. No es mi culpa que sean empleados en conflictos inter étnicos o de otro tipo”

Actualmente Izhmash, la empresa que fabrica el fusil original afirma que producen alrededor de 1 millón de unidades y que el 90% restante son imitaciones o réplicas.


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