viernes, 19 de febrero de 2010

Higuera asesina

De todos es sabido, que casi todas las especies animales evolucionan con el paso del tiempo y se adaptan de forma física,psicología, social,etc,a las necesidades que genera el entorno.

Con las especies vegetales también se produce esa evolución. Algunas plantas crecen muy alto para captar mayor cantidad de rayos solares y desarrollarse más fuertes. Otras aprenden almacenar grandes cantidades de agua en climas desérticos. Otras crean mecanismo de defensa contra quienes desean destruirlas: convierten sus hojas en espinas,segregan resinas pegajosas, generan olores extraños. Todo un mundo de creatividad para poder sobrevivir.

Hay otras plantas que llegan más allá, y ya no solo se defienden sino que castigan aquellas especies que nos ayudan, como es el caso de las higueras.

Este frutal,carece de flores externas, pues éstas se encuentran en el interior de los higos inmaduros. Esto supone un problema a la hora de polinizar, puesto que los insectos no pueden ver sus colores ni oler su perfume para ser atraídos.Las higueras han encomendado la tarea de su polinización a las avispas.Con esta acción se puede representar un ejemplo de relación mutuamente beneficiosa entre dos especies.

El higo inmaduro constituye el lugar donde determinadas especies de avispas van a poner los huevos, un sitio que sus larvas van a considerar acogedor en donde crecer, pues están protegidas y tienen aporte de comida. La maduración del higo, así como la cría de las larvas de avispa y la generación de polen están sincronizadas de tal modo que las avispas pueden polinizar las flores de otros higos. La higuera proporciona el incentivo de comida gratis y un refugio, pero a cambio consigue la polinización cruzada.



En la sociedad humana hay muchos individuos que se saltan las reglas en beneficio propio y otros que intentan impedírselo. Pero la higuera no tiene quien la proteja de esos individuos, así pues se lo tiene que guisar y comer ella sola.

En este caso hay avispas que quieran usar los higos, pero que no quieran polinizarlos.La higuera se las ha ingeniado para crear un sistema de castigo para que la simbiosis no se transforme en parasitismo: dejar caer los higos que no han sido polinizados por la avispas, matando así a su descendencia.

Y como se dijo en aquella película: "Ninguna fechoría queda libre de castigo".

Fuentes:Neofronteras.com,Taringa

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